¿Crees que un espacio pequeño no puede ser impactante? Hoy te demuestro lo contrario con la renovación de un medio baño que pasó de ser un espacio pequeño y olvidado… a ser inolvidable.
Spoiler: hay drama, tonos intensos y un espejo muy protagonista.
Este makeover surgió de mis ganas de experimentar un poco con un color más oscuro. Que es algo que nunca había hecho hasta ese momento en mi casa. ¿Y qué mejor lugar para probarlo que un medio baño? Es un espacio pequeño, con poca luz natural, lo que lo convierte en el lienzo perfecto para crear un ambiente dramático, envolvente y con mucho carácter. ¿Quién dijo miedo?
La fuente de inspiración de todo el espacio vino del tope del mueble de baño que ya tenía; el cual cuenta con una textura de piedra y vetas en color vino que me gustó mucho. A partir de ahí, diseñé una paleta de colores monocromática con toques metálicos en negro y dorado, ideal para lograr un look sofisticado, misterioso y lleno de drama.
En esta ocasión, me aventuré a usar un tono profundo para la pintura, el color se llama: Medieval Wine de Behr, un ciruela oscuro con muuucha personalidad. Y sí, fue amor a primera brocha. Bastaron tan sólo dos capas para cubrir todo el espacio gracias a la buena cobertura de esta pintura. ¿Y yo? Enamorado del color.
Una vez que terminé de pintar los muros, reemplacé el espejo rectangular que ya tenía en el baño, por uno circular (modelo STOCKHOLM de IKEA) con marco de chapa de nogal que hacía un match perfecto con el tono de las puertas de mi casa. Mi truco infalible para colgar espejos o cuadros sin sufrir: usa cinta adhesiva detrás del espejo para marcar los orificios y transfiérelos directo a la pared. ¡Perfecto a la primera!
No estaba en mis planes iniciales hacer esto, pero… ya saben cómo es esto del diseño. Después de pensarlo un rato, decidí pintar la parte inferior del mueble del baño para continuar con la estética dramática y oscura en un tono negro mate. El color que escogí fue Private Black de Behr, un tono intenso en una pintura vinílica + primer que facilita todo el proceso. La verdad, no tomó mucho tiempo renovar el mueble; simplemente ijé suavemente, usé un rodillo de esponja (¡adiós marcas de brocha!) y di dos capas para un acabado impecable. ¡Super recomendado!
Finalmente para los toques finales del espacio, no quise saturar una habitación tan pequeña, así que elegí elementos muy puntuales:
Este makeover, sin duda fue una prueba de que un espacio pequeño puede tener un gran impacto si te atreves a jugar con el color y los contrastes. Ahora cuéntame en los comentarios: ¿Te gustó este cambio? ¿Te animarías a pintar un baño en un tono vino profundo? Y si haces tu propia versión, ¡etiquétame en redes como @estilointerior.mx para verla.
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Dale un toque divertido a tu baño con este diseño que preparé para ti. Descárgalo e imprímelo en casa.
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